No podian faltar en este selecto museo de los horrores, dos clasicos del estilísmo automovilístico. De una parte la plaquita de san cristobal, patron de los conductores, y por otra un clasico familiar, el papa no corras... asin sin pronombre.
Que adornos más bonitos para un coche. Ahora que como el perrito que se ponía en la bandeja trasera y que movía la cabecita, no hay adorno para un coche más bonito y moderno.
No podian faltar en este selecto museo de los horrores, dos clasicos del estilísmo automovilístico. De una parte la plaquita de san cristobal, patron de los conductores, y por otra un clasico familiar, el papa no corras... asin sin pronombre.
ResponderEliminarQue adornos más bonitos para un coche. Ahora que como el perrito que se ponía en la bandeja trasera y que movía la cabecita, no hay adorno para un coche más bonito y moderno.
ResponderEliminarEl perrito con parkinson es una pieza clasica tambien....
ResponderEliminarVisto lo visto mejor que el papa no siga corriendo
ResponderEliminarCreo que llegamos tarde, seria cuestion de cambiar el tiempo del verbo correr...
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