Es lo que tiene ponerse a escribir, hace un par de días una buena amiga me decía que le gustaba el nuevo rumbo del blog, con estos cuentecillos que apenas empiezan y que nunca acaban, pero es mi blog, es libre y no acabo las historias si no me apetece hacerlo.
Le decía yo a mi amiga que estos micro relatos o como se llamen, son algo más que un ejercicio, un entretenimiento, son una necesidad porque aunque mi vida nada tenga que ver con la de esas fotos, hay mucho de mí en cada una de esta historias.
No se porque el poste ha tomado este punto asin un poco bajuna, no es mi intención.
Mi intención es seguir contando ese momento mercadillo del martes cuando me compre ese par de juego de sabanas estupendos. La cosa iba a acabar ahí pero siguió mas adelante con un par de vaqueros, vaqueros de mercadillo. Me subí a casa con los pantalones y me los probé, bajé mas tarde porque uno no me veía, el otro no me había fijado pero no me acababa de convencer, vamos que no me lo pongo ni muerto.
Claro, uno ya tiene unas edades en las que vestirse con pantalones vaqueros con mega camales y rollo asin un poco urbano con cadenas pro los bolsillos y tal, pues como que ya me veo muy mayor. De camino disfruté hurgando en una mesa en la que se acumulaban multitud de objetos con un polvo acumulado más que sospechoso. Había un poco de todo, desde cuadritos decorativos del tamaño de un paquete de tabaco con motivos marineros (me pille dos),a juegos de posavasos, auriculares, gafas de sol … y lo mejor el eslogan corto pero contundente:
3 por un leuro.
De acuerdo para que quiero dos diminutos cuadros con un barquito. O unas gafas de sol no homologas, .. pero eran tan baratos, 3 por un euro. Y el gitano venga de sacarme figuritas de resina horrorosas con motivos heavy metal y servidor que no, que se quedaba con los barquitos y los posavasos. Menos mal que nos quedan los mercadillos para estos arrebatos de compra compulsiva, claro donde me van a dar 3 cosas, aunque sean 3 mierdas por un euro,,,,,,