martes, 28 de febrero de 2012

EL eXPeRiMENTo

Hay libros que parecen destinados a acabar siendo adaptados al cine, historias que por sus características se enriquecen con el lenguaje cinematográfico. Bajo mi punto de vista, “El experimento” de sebastian Fitzek es un claro ejemplo de ello. A medio camino entre el thriller y el terror, el que es considerado el maestro del terror psicológico alemán, nos sumerge en una claustrofóbica historia cuya acción transcurre íntegramente durante una noche en un sanatorio mental privado de la ciudad de Berlín. Una larga y angustiosa noche en las que los protagonistas que quedan encerrados y aislados en esa clínica, a la espera de que amanezca y puedan ser rescatados, tiene que enfrentarse a “el destructor de almas”, un despiadado y cruel psicópata que destruye las mentes de sus victimas, condenándolas a vivir la peor de sus pesadillas el resto de sus vidas, anulándolas emocionalmente, devastando sus almas.
Una denso relato que vamos conociendo a través de el informe medico que sobre lo ocurrido escribió el psiquiatra que posteriormente trató a una de las victimas de aquel suceso y que paralelamente a la historia que leemos, vamos conociendo a través de un grupo de estudiantes que participan tambien leyendo este informe, en un singular experimento.
Toda una noche y madrugada, en la que los escasos pacientes y personal de guardia del viejo sanatorio deberán intentar no caer en las trampas de tan desequilibrado personaje en una despiadada y cruel cacería de la que intentaran salir inmunes.
Caspar, el protagonista ingresado con un ataque de amnesia, deberá descubrir primero quien es el para así poder desenmascarar quien se esconde tras el destructor de almas. En un continuo juego con el lector, el autor nos va dejando pistas y mensajes que nos ayuden a resolver tan confuso enigma, pistas que finalmente desembocaran en un sorprendente final no exento de posibles interpretaciones.
Con un ritmo vertiginoso, que engancha desde sus primeras paginas, “El experimento” puede llegar a resultar confuso por los nombres alemanes de sus protagonistas que no facilitan precisamente la lectura. Sebastián Fitzek narra la historia a golpe de cronometro, situándonos en la acción con precisas franjas horarias y, como decía al principio, con un ritmo muy cinematográfico que probablemente haría mas comprensible y sobretodo intensa una historia como esta, en la que los pequeños detalles, los ambientes claustrofóbicos y los golpes de efecto cobran tanta importancia. Un relato en suma de ágil lectura que estoy casi convencido que en breve podremos disfrutar en una pantalla de cine.


lunes, 27 de febrero de 2012

PeCCaTa MiNUTA



El pasado sábado, y de la mano de Francachela teatro tuve a bien sumergirme en los mas oscuros abismos del pecado y las debilidades humanas. Un viaje por los deseos mas escondidos de la mano de diferentes personajes que individualmente nos iran guiando por los entramados recovecos del placer. Un corto aunque intenso trayecto para el que se divide en grupos al público que de forma metafórica recorre los espacios de la sala invitados por los actores de tan personal montaje a compartir sus oscuras debilidades. La lujuria, el riesgo, los excesos…un recorrido en el que el espectador participa activamente, sin juzgar dichas debilidades, como espectador o tomando parte en ellas, eso depende del camino que este quiera recorrer. En la intimidad de una habitación, un baño, etc... El público es testigo mudo de los placeres más ocultos de unos personajes que viven de espaldas al espejo. Un espejo cruel y despiadado al que terminan enfrentándose y que termina condenándoles a una oscura y eterna condena de silencio, de falsedad.
Un interesante espectáculo con el que Francachela sigue investigando nuevos cauces a la hora de contar una historia. Una arriesgada propuesta, un interesante ejerció de teatro intimo. Una fantástica oportunidad para disfrutar, para vivir, sentir, palpar con unos personajes condenados a la incomunicación de la mano de Francachela teatro.




Peccata Minuta de Francachela Teatro from senseless on Vimeo.

FuGA

Autor de títulos como “El método GronHolm” o “Palabras encadenadas” y garantía de éxito en nuestras carteleras, Jordi Galceran llego a nuestra cartelera la semana pasada con “Fuga” una obra que después de haber cosechado gran éxito durante meses en Madrid, se ha estrenado con éxito en el teatro Olympia de valencia. Un texto de lamentable actualidad, un doble salto mortal con pirueta en la España de la picaresca, esa que nos acompaña desde siglos y que tristemente nos sigue acompañando.
Un político acusado de corrupción urbanística que ha sido abandonado por su mujer para escaparse con el periodista que destapó el escándalo, se plantea acabar con todo de un tiro en la sien cuando la inesperada visita de una vendedora a domicilio le lleva a replantearse comenzar con una nueva vida. Una nueva vida en la que también tienen cabida el marido violenta de la vendedora, su padre inválido y una prostituta interpretada por Kira Miró. Un continuo juego con el espectador que desconcertado va descubriendo que nada es lo que parece y que tras una sorpresa siempre puede haber otra. Una nueva vuelta de tuerca al vodevil, a la comedia de entradas y salidas de la que destacaría un envidiable ritmo en el que sin duda tiene bastante que ver su directora Tamzin Townsend y la compañía teatral Yllana que aporta su particular granito de arena en un montaje fluido y moderno.
En cuanto a los actores, destacar el trabajo del fantástico actor José Luís Gil, conocido sobre todo por su trabajo en series como “Aquí no hay quien viva” o “La que se avecina”. Un estupendo actor con ese punto de verdad tan difícil de encontrar en la escena y especialmente dotado para la comedia. El perfecto interprete para un clásico de la comedia, el pobre hombre normal al que le pasan cosas, muy en la línea de los grandes como López Vázquez o Agustín Gonzáles por citar dos. Amparo Larrañaga interpreta a la mujer que se cruza con el político en cuestión, un personaje con sorpresa que la actriz interpreta con exceso, dándole un tono de sainete que en ocasiones me remitía a Lina Morgan. Y no estoy cuestionando para nada la labor de Lina que me parece una fantástica cómica y mujer de teatro que se ha ganado durante muchos años el éxito y la admiración de toda la gente que la sigue pero el trabajo de Amparo Larrañaga no me gustó nada, rechinaba muchísimo en una obra en la que, bajo mi punto de vista, ese tono tan “zarzuelero” rechinaba constantemente con el resto de las interpretaciones.
Tampoco Kira Miró me gustó especialmente, podría haberle sacado mucho mas partido a otro personaje clásico, el de prostituta tonta. En cuanto al resto de actores cumplen a mi modo de ver con corrección, especialmente el actor que interpreta al padre de la vendedora.
Una divertida obra que no aburre en ningún momento y en el que las sorpresas están garantizadas.

viernes, 24 de febrero de 2012

DeSPiDieNDO MaDRiD

Llegamos al último día de nuestra corta estancia madrileña. Salimos `pronto del hostal en dirección a Atocha antes de que la manifestación contra la reforma laboral en sol nos impidiese desplazarnos. Al llegar a la estación la muchedumbre se iba agolpando por los pasillos proveniente de destinos de cercanías. Cuando nos quisimos dar cuenta nos encontramos en medio de una monumental bronca entre los manifestantes que intentaban acceder a la estación y a los que se les impedía cerrándoles las puertas de acceso lo que provocó un conato de carga policial de la que afortunadamente salimos indemnes. Nunca había corrido delante de la policía cargado con una trolley. Tras dejar las maletas en consigna nos lanzamos a la calle siguiendo a los manifestantes con la esperanza de disfrutar de las escasas horas que nos separaban de la salida del tren. Huyendo del gentío nos adentramos en un parque cercano, donde tuve oportunidad de descubrir un rincón de Madrid que desconocía, “La cuesta del Moyano un paseo ajardinado repleto de puentecitos de libros de segunda mano, una debilidad.
Un poco mas despejado el paseo del prado y aprovechado el buen día reinante, nos acercamos hasta la fuente de Neptuno y de allí a la iglesia del Cristo de Medinaceli del que soy fans y al que acudo siempre que puedo cuando visito la catedral, aproroveché para comprar merchandising del santo que resignado preside la iglesia acumulando deseos y peticiones a sus espaldas.
De camino a la estación, visitamos el Caixa Forum, o seria mas correcto decir visitamos el hall del Caixa forum, un fantástico edificio que en esta ocasión no albergaba ninguna exposición que me provocase el mas mínimo interés, por lo que finalmente nos acercamos hasta el Museo Reina Sofía, ignorantes que faltaban apenas 30 minutos para su cierre lo que motivo la visita mas fugaz al museo que nunca he realizado. Lo justo para subir al segundo piso y visitar el Guernica y poco más.
Ya en la calle y a pesar de que la ración de churros del desayuno había sido excesiva, nos aprovisionamos de un par de sándwiches y dimos buena cuenta de ellos sentados en un escalón de la calle Atocha. Mi intención hubiera sido comerme un tradicional bocadillo de calamares en el Bar Brillante pero el tiempo se imponía y las tradiciones tienen cola, es lo que tienen… Finalmente nos tuvimos que conformar con un sándwich de plástico que apuramos con el tiempo justo para coger el tren de regreso a valencia, un tren que en breve espero coger de nuevo y disfrutar de otro breve pero siempre intenso fin de semana en Madrid.

DRaCuLA eN ESCeNa

Como contaba en el anterior post, fue finalmente Drácula la obra de teatro elegida para ver la noche del sábado. Una decisión no exenta de polémica pues a pesar de haber leído algunas malas críticas sobre esta, me resultaba muy atractivo ver una versión de este clásico del terror por primera vez para mí encima de un escenario.
Recuerdo ya hace algunos años, haber visto en escena “La mujer de negro” también con Gutiérrez Caba y con el director de este “Drácula” Jorge de Juan, en aquella ocasión ejerciendo de actor el resultado fue mucho más que satisfactorio. Una obra que durante años se ha repuesto con éxito y que con tan solo 2 actores conseguían trasmitir muchísima inquietud en el espectador. También es cierto que el tema del vampirismo me resulta personalmente muy atrayente, por lo que sin pensarlo demasiado compramos las entradas y nos encaminamos hacia el teatro Marquina envueltos en una noche fría y carnavalesca.
El resultado fue decepcionante. El texto que adaptaba la poderosa obra de Bram Stoker intentaba sintetizar tanto el argumento original que en ocasiones resultaba confuso, pero no era eso lo peor de esta adaptación. Si bien es cierto que nos encontrábamos ante una obra por todos conocida ya sea a través de la literatura o el cine, lo cierto es que se echaba de menos un mayor riesgo en su adaptación que nos enriqueciera el argumento original. Se echaban en falta escenas más poderosas, imágenes que pudieran suplir la grandeza que el cine nos ofrece en planos cortos y que aquí se podrían haber intentado resolver con una mayor originalidad en su puesta en escena. Una adaptación sin riesgo, una historia que podría haber llegado a un público más joven pero que su excesivo encorsetamiento en su adaptación la convierte en carente de interés. Una buena estenografía y un correcto uso del sonido tan importante en el cine de terror y suspense, termina empobreciéndose con unas actuaciones muy poco atractivas. Emilio Gutiérrez Caba, un excelente actor interpretando a Van Helsing, en ocasiones da la impresión de que anda preguntándose que demonios hace metido en esta obra de teatro, Ramón Langa da vida a un Drácula carente de fuerza, de sensualidad, ni siquiera su poderosa voz consigue darle intensidad a un personaje tan tractivo como el príncipe de las tinieblas. Tampoco el joven actor Martiño Rivas, conocido por ser uno de los protagonistas de la exitosa serie “El internado” sale demasiado airoso con su personaje que deambula por escena sin saber muy bien que hacer con sus manos. Del resto del reparto destacaría a César Sánchez y Mario Zorrilla interpretando al Doctor Seward y a Reinfield respectivamente. Por ultimo las dos mujeres que intervienen en la obra pasean su personaje con un aceptable corrección. Los inquietantes momentos que prometía el programa se limitan a un par de sustos potenciados por el sonido y a las intervenciones del personaje de Rainfield deambulando a oscuras por el patio de butacas lanzando alaridos. Se echaron en falta una mayor sensualidad al tratar un tema tan sugerente, resuelta con apenas un escueto apunto a modo de refregón del vampiro con las dos actrices. Un apasionante relato resuelto casi de manera infantil y con unos efectos especiales que salvo la levitación de la joven Mina en escena, dejaban mucho que desear. Las apariciones del murciélago de peluche volando por el patio de butacas iban acompañadas de las risas del público que casi hubiera valorado más que lo hubiesen lanzado directamente al escenario desde la otra punta de la platea. Un loable intento que muy a pesar de contar con buenos actores, hubiera requerido un mayor riesgo y un mayor presupuesto porque no decirlo pese a contar con Bruce Willis haciendo de conde Drácula, al menos de su voz en castellano.

jueves, 23 de febrero de 2012

AFTeR DRaCuLA

Ya por la tarde y tras un breve aunque necesario descanso, nos dirigimos a la taquilla de entradas de Última hora sin tener demasiado o mejor nada claro la obra de teatro que íbamos a escoger para ver aquella noche. Madrid a esas horas ya estaba intransitable, más si cabe cuando toda la gente que venia de la recién terminada cabalgata de carnaval había finalizado. Ríos de personas inundaban las principales vías de la capital mientras nosotros seguíamos intentando ponernos de acuerdo sobre que ibamos a hacer. Al llegar a la taquilla, pocas opciones nos quedaban a pesar de la amplia oferta teatral madrileña. Con dudas decidimos decantarnos por la versión teatral de Drácula que se esta representando desde hace unas semanas. Raudos emprendimos camino hacia el teatro, perdiéndonos ente mareas de gente disfrazada. Finalmente encontramos el teatro y retiramos las entradas, aprovechando la hora escasa que nos separaba del comienzo de la obra para cenar en un bar cercano entre los silbatos del árbitro del partido que estaban retransmitiendo y los aullidos de los espectadores que se apiñaban junto al aparato de televisión. Una cena que tuvimos que apurar en los últimos minutos poniendo en riesgo el acceso a la sala debido a lo apurado del tiempo del que disponíamos.
Tras la representación, nos encaminamos hacia gran vía, donde cientos de personas transitaban eso si mas animadas que un par de horas antes. En esta ocasión los pitufos, pocoyos y superhéroes de saldo eran sustituidos por chinos con bolsas de plástico vendiendo lastas de cerveza y bocadillos. Nos dejamos arrastrar por la marea y acabamos en chueca donde, tras un exhaustivo recorrido turístico en que nos perdimos como 4 veces, terminamos tomando una copa en el emblemático Bar Madrid donde servidor tuvo a bien disfrutar de un espectacular daikiri que nos sirvió un camarero que era un clon de Joaquín Sabina, eso si, con sombrero Panamá en lugar de chistera.

miércoles, 22 de febrero de 2012

SaTuRDay MoRNiNG FeVeR



No quise desaprovechar la mañana del sábado en Madrid, por lo que a las 10 de la mañana ya estaba en la calle dispuesto a dejarme perder por las calles de la capital. Lo primero un desayuno, unos churritos con los que hacer frente a una gélida mañana de invierno. Un cigarrito en la puerta del sol, rodeado de vociferantes hombre-anuncio de compra/venta de oro donde entre otras cosas tuve oportunidad de hacer nuevos amigos.
Cuando me quise dar cuenta y como si de una surrealista pesadilla se tratara, estaba rodeado por 4 pitufos, 2 monstruos de las galletas, Dora la exploradora y un Pocoyo con mocasines negros y calcetines blancos de deporte. No se si para bien o para mal, descubrí que no me encontraba en un sueño, aquello era real, demasiado real pensé en el momento en el que uno de los pitufos salio corriendo con el bolso de una descuidada turista japonesa en la mano.
“Si el padre Abraham levantará la cabeza” pensé mientras me encaminaba hacia la gran vía por la calle preciados que dadas las horas todavía resultaba transitable. Disperso entre los escaparates llegué hasta Callao con esas fantásticas pantallas gigantes escupiendo glamorosas imágenes por todos sus píxeles. Para mi sorpresa, un nuevo rodaje se cruzo en mi camino.
¿Será una señal? Dos rodajes en pocas horas, ¿Acaso es una señal para que encauce mi vida hacia la interpretación? Tampoco lo pensé demasiado, tras 15 minutos ejerciendo mirón no pude más que acordarme del genial Fernando Fernán Gómez cuando decía aquello de que en el cine te pagan por esperar, y no quería perder mas tiempo en mis escasos dos días en la capital por lo que veloz me dirigí a la gran vía no sin ates hacer una nueva parada para desayunar de nuevo.
Si, los churros habían estado bien pero no podía desaprovechar la oportunidad de desayunar esta vez en una mesita con vistas a tan frecuenta vía con inmejorables vistas. Un segundo desayuno que me lanzó de nuevo a la calle, dejándome llevar por los inmensos carteles de los teatros de camino a la pza de España.
Una vez allí, y después de un oportuno y soleado cigarrito investigué hasta dar con la calle donde se encuentra la librería de cine 8 y medio, en la denominada calle del cine, donde no perdí oportunidad de pasearme y fotografiar las estrellas de nuestro particular paseo de la fama hispano. Fue mi concesión del día a ese espíritu friki tan innato en mí. Tras un exhaustivo aunque nunca completo repaso a las estanterías de tan fantástica librería y después de hacerme con un ejemplar de un libro dedicado a los lugares de Madrid en los que se han rodado películas, acudí al encuentro de mi amigo, que despistado vagaba por la gran vía en mi búsqueda.
Un encuentro que celebramos en una cafetería de franquicia atendida por personal filipino y que rematamos tras una breve paseo por la calle Fuencarral en un Bar de de menú económico con el informativo de las 3 de fondo, otra concesión, en este caso a la realidad.


martes, 21 de febrero de 2012

ViNiLOS cON ANTiFaZ


ThE HoLE


“Hay que estar en el agujero para salir del agujero”
Como anticipaba en el anterior post, el viernes estuve viendo “The hole” en el teatro Calderón de Madrid. Un espectáculo imposible de definir, teatro, circo, variedades, musical, cabaret. Y es precisamente esa inclasificación lo que lo hace más atractivo. Lo mejor sin duda es disfrutarlo sin perjuicios, dejándose llevar por su arriesgada propuesta con el único y exclusivo propósito de pasarlo bien. De la mano de la compañía teatral Yllana y del actor Paco León, surgió hace pocos meses esta nueva propuesta de ocio para la noche madrileña. Inspirado en otros espectáculo de parecida factura que llevan años triunfando en capitales como New York o Londres, The hole nos ofrece la oportunidad de disfrutar de dos horas de diversión sin complejos en un ambiente distendido, canalla, mientras te tomas una copa o incluso cenas en el patio de butacas reconvertido ahora en una sala de cabaret con mesas y camarer@s. Figura imprescindible del espectáculo es el maestro de ceremonias que ejerce de hilo conductor en esta descarada fiesta en la que diferentes invitados van entrando en el agujero al tiempo que nos ofrecen cuidados y espectaculares números visuales de acrobacia, contorsionismo, etc… Una fiesta no exenta de argumento, la declaración de amor de su conductor por una rata llamada Maria del Mar, sirve de eje argumental sobre el que desarrollar tan peculiar show. Impresionante la labor de Alex O´dogherty como presentador canalla, divertido, trasgresor. Sus intervenciones son una pura provocación, genial el monologo en el que declara su amor a Maria del Mar. Una labor, la de conductor, en la que se van alternando diferentes actores y actrices, así como distintos números que hacen que The hole pueda ser visto en diferentes ocasiones y disfrutar de espectáculos diferentes según la fecha en la que lo disfrutemos. Destacar también los diferentes artistas que intervienen en la representación. Vinila Von Bismark alternando la canción , el baile e incluso su trabajo de DJ en la pausa del espectáculo, el grupo de cuatro mayordomos divertidísimos interpretando música a capella, el patinador ingles que interpreta canciones de Tom Jones o las súper-nenas, sugerente mezcla de erotismo y acrobacia en las alturas. No falta, por supuesto una continua interacción con el publico que conforme avanza el show va relajándose y dejándose llevar por tan políticamente incorrecto espectáculo. En resumen, y aunque no soy muy dado a hacer recomendaciones, no os podéis perder este fantástico show cuyo único y loable fin es pasarlo bien, muy bien.
PD. Lamentablemente y aunque la trasgresión es mucha, y durante la obra se puede beber alcohol, comer, lo verdaderamente políticamente incorrecto hubiera sido que se pudiera fumar. Pero ahora, en este país ya no se puede hacer, ni siquiera en el agujero.


lunes, 20 de febrero de 2012

MaDRiD, una VeZ MáS

Una vez más, el laboratorio del Dr. Magenta se convierte en un particular cuaderno de bitácoras en el que contaros mi visita a Madrid este pasado fin de semana.Un corto viaje que aproveché entre otras cosas para ir al teatro y disfrutar de una ciudad que nunca deja de sorprenderme y divertirme. Coincidió también que me estrenaba viajando con el AVE, un trayecto de menos de 2 horas que siempre se agradece y que me permitió llegar allí a las 5 de la tarde lo que nos posibilitó aprovechar la misma tarde del viernes.


En la foto las maravillosas vistas de mi suite.
Una vez en en la estación de Atocha, servidor se mimetizo en paco Martínez Soria, solo me faltaba la cesta con las gallinas y la cabra escapándose cruzando la calle. Después de montar una pequeña performance en el momento de acceder al metro cuando mi amigo se quedo pillado entre las puertas de acceso en el momento en el que intentaba colarse, mientras servidor apurado improvisaba una historia tan absurda como imposible que contarle al encargado que raudo se dirigía hacia nosotros. Una vez en la puerta del sol, nos encaminamos hacia el hostal donde teníamos reservado alojamiento mientras mi amigo con una maleta tamaño XXL en la que nunca llegue a averiguar lo que había metido iba arrollando a todo el que se cruzaba por su camino. La primera impresión al ver la entrada al hostal fue, para que negarlo, decepcionante. Un edificio centenario que a duras penas soportaba la pesada carga de 5 pisos sobre sus espaldas. Afortunadamente, y como bien decía La bella, “la belleza esta en el interior”, y el establecimiento ganaba en las distancias cortas y a pesar de su humildad no carecía de las comodidades básicas e incluso disponía de una especie de tabla de planchado eléctrica que te permitía mantener la ropa sin arrugas y que nunca puse en marcha porque ya hace años que deseché el verbo “planchar” de mi vocabulario. Ya lo dijo el poeta, ¿o fue un modisto? La arruga es bella, y la verruga también añado yo.
Ya en la calle, nos sumergimos en la vorágine madrileña sin evitar los tumultos que acompañan a una tarde de viernes, más si cabe cuando en estos días se celebraban los carnavales y la feria de Arco que atrae a muchos visitantes.
Tras un primer contacto con la ciudad en el que simplemente nos dejamos llevar por la muchedumbre que se agolpaba por el centro, nos dirigimos hasta la plza mayor para ver una actuación programada dentro de las actividades en homenaje a San Carnal, la actuación de un grupo de teatro de animación francés que confieso me resultó bastante decepcionante a la par que gélido. Si bien es cierto que a nuestra llegada la temperatura era mas agradable que en valencia, una vez entrada la noche, esta se tornó fría en exceso por lo que cambie mi look de Martínez Soria por el de “¿Dónde esta Wally? Con gorrito de punto incluido.
Antes de cenar nos dimos una vuelta por el maravilloso Mercado de San Miguel a fin de olfatear todas las delicatessen gastronomitas que allí se ofrecen para ir abriendo boca antes de la cena. Mucha exquisitez gastronomita para acabar cenando un kepab en un pakistaní de más que sospechoso aspecto, pero lo ajustado de nuestra agenda nos impedía seguir buscando. Apenas nos separaban escasos minutos para que empezase el espectáculo para el que teníamos entradas y rápidamente allí nos dirigimos no sin antes perdernos 4 veces hasta encontrar el teatro en cuestión.
Con la satisfacción de haber pasado 2 horas estupendas salimos del teatro Calderón y aunque el frío era mucho y el cansancio ya empezaba a hacer mella decidimos dar una vuelta en la que, como era de esperar, acabamos perdiéndonos de nuevo, no sin antes saludar a todas las prostitutas que nos cruzábamos por la calle Montera, que otra cosa no, pero uno es muy educado y si me saludan yo contesto. Un contratiempo que por azar nos hizo acabar con un rodaje cinematográfico en plena calle con el actor Juanjo Puigcorbé vestido de dragg-Queen en una escena en la que en la ficción era asaltado por un grupo de cabezas rapadas. Aguantamos estoicamente durante cerca de una hora, esperando una baja en el grupo de figuración que nos diera la oportunidad de debutar en la pantalla grande aunque fuera cruzando la calle pero nada, nos venció el sueño terminamos por volver al hostal al tiempo que esquivábamos incontrolados y carnavalescos grupos de gente por la gran vía y que hizo que la noche se alargara en exceso, aunque nunca lo suficiente….

lunes, 13 de febrero de 2012

CRiMeN PeRFeCTO

De nuevo teatro y cine se vuelven a dar la mano en esta obra que tuve ocasión de ver ayer en un teatro de valencia. Si en el caso de David Mamet, se trataba de una obra de teatro que hablaba sobre el mundo del cine, en “Crimen perfecto” asistimos a la puesta en escena del clásico de Alfred Hitchcock, un clásico menor pero tratándose del maestro del suspense, un clásico en fin.
La historia de la planificacion, desarrollo y desenlace de un crimen perfecto que como en muchas ocasiones, no lo es tal. La inmortal cinta protagonizada por Grace Nelly y Ray Milland sobre las tablas de un escenario. Una tarea sin duda complicada, la de trasladar el particular universo de este director al teatro. Sin duda lo que más me gustó de esta producción, fue precisamente la forma en la que su director la traslada a la escena. Una curiosa puesta en escena que nos traslada directamente al rodaje del citado film y en el que las diferentes escenas están desarrolladas como si de un rodaje cinematográfico se tratase, en el que los actores interactúan entre si entre escena y escena. Pero sin duda lo más interesante resulta que el escenario sea giratorio, lo que permite tener distintos puntos de vista de la escena, algo imprescindible en cualquier película del director. Este peculiar montaje, permite al espectador situarse y ver la obra en diferentes planos, esos mismos planos que Hitchcock tan bien manejaba. Un autentico homenaje al director en el que no faltan, los planos detalle, fragmentos de algunas de sus bandas sonoras, y hasta la propia voz en off del maestro. Sin duda un autentico festival Hitchcock que agradará especialmente a sus admiradores.
Sin duda la parte mas fallida de la obra, a mi modo de ver, es la referente al trabajo actoral. A destacar el trabajo de Jorge Sanz y de Antonio Albella componiendo un “curioso” personaje. L protagonista femenina y su amante en la ficción no están en ningún momento a la altura de este recomendable montaje.

FuSióN HiSPaNO-ORieNTAL



viernes, 10 de febrero de 2012

A PoR ToDaS

Un nuevo texto de David Mamet llega a la escena valenciana, otra interesante obra de este prolífico autor que tan buenas historias nos ha regalado. En esta ocasión la pluma de Mamet apunta, con esa mirada entre cínica e irónica y en ocasiones cruel que le caracteriza, en el mundo del cine. Tres personajes y un eterno dilema, dos altos ejecutivos de una productora cinematográfica que buscan el éxito, el dinero fácil, el poder. Dos altos ejecutivos, con un gran éxito comercial entre manos y una concienciada secretaria que terminará poniendo en duda sus más aferradas convicciones materiales. Unas convicciones que uno de ellos terminará por cuestionarse cuando una mujer entra en escena y les plantea que en lugar de ese esperado taquillaza cinematográfico, produzcan una película de arraigada conciencia social.
Dos estupendos personajes masculinos, retratados con la maestría de la que hace gala este autor, que pasan del entusiasmo a la duda, y de esta a la violencia contenida. Dos personajes al limite en un mundo de cuestionable honestidad como es el mundo del cine. Un interesante texto que, aunque ambientada en el mundo del cine, consigue transponer y generalizar a cualquier ámbito social. Conformarnos o arriesgar, el eterno dilema.
Una sencilla aunque inteligente puesta en escena sobre la que los alterados ejecutivos se mueven con soltura. Ágiles diálogos, frases que se entrecortan unas a otras y esa exacerbada gestualidad a la que los personajes de Mamet nos tienen acostumbrados. Una correcta interpretación del trío protagonista en el que personalmente destacaría el trabajo del actor Enrique Arce, convierte esta propuesta teatral en un opción de muy recomendable visión.

jueves, 9 de febrero de 2012

DesMoNTaNDo LA SoPa dE AJO

Hacia tiempo que no colgaba una entrada gastronómica en el blog. Mis experimentos en la cocina se limitan al fin de semana, el resto de días me limito a alimentarme de forma rápida y sin complicaciones. Ayer, a mi vuelta del trabajo y a pesar de las intempestivas horas en las que llego a casa, decidí sino sofocar, si sobrellevar la ola de frió siberiano que nos invade, preparándome un plato a la altura de tan intempestivas temperaturas. Sin pensarlo demasiado, puse una cazuela al fuego y me lance a la elaboración de un sofrito, sumergiéndome de lleno en ese universo que a mi tanto me fascina que es el Universo caldo.
Siempre me ha sorprendido el hecho de poder crear sabores, simplemente combinando ingredientes y añadiéndoles agua. Una elaboración que servidor, como buen científico, lleva hasta sus últimas consecuencias, no en vano esto es un laboratorio.
Si bien en principio mi idea era hacer una sopa de ajo, lo cierto es que decidí de inconsciente manera “reconstruir” tan simple y a la vez tradicional plato, para convertirlo en una sopa de indefinidos componentes e indefinible sabor.
Tras sofreír un par de dientes de ajo en aceite de oliva, me lancé a la nevera haciendo acopio de todos esos alimentos que apesadumbrados y decaídos esperaban la llegada de su caducidad. Añadí un poco de carne picada que me había sobrado de los tallarines del sábado y un puñadito de cebolla picada. Tras rehogarlos en armonía, añadí un poco de tomate triturado, indispensable para cualquier sofrito que se precie de ello. Más tarde y mientras me cortaba un trozo de queso con el que saciar mi hambruna, encontré en la nevera una solitaria cortada de jamón serrano que en silencio no cesaba de gritar: úsame, úsame.
Dicho y hecho, corte la misma en pedacitos y la añadí a la cazuela mientras seguir investigando en la nevera cualquier alimento susceptible de entrar en fase de caducidad para ser utilizado, reparando finalmente en un bote de garbanzos que apesadumbrados reposaban en una estantería de mi marchito refrigerador.
Unos garbanzos le dieron ese punto legumbres que le faltaba, o no a mi sopa de ajo o mejor de todo. Para terminar el sofrito, le añadí un poco de pimentón, indispensable en cualquier caldo que se precie y no me preguntéis porque y un poco de colorante que enriqueciese al menos visualmente tan desconcertante plato.
Un poco de agua y esa pastilla de caldo de pollo tan imprescindible como prescindible pero que sin duda aporto una sobredosis de sabor y de glutamato a mi insulsos devenir diario. El problema es que con tanto condimento, termine sin saber muy bien que añadir a tan improvisado caldo. Si bien atendiendo a la receta original de la sopa de ajo, mi intención era añadir pan duro, finalmente y atendiendo a tan caótica receta decidí decantarme por un clásico, el arroz. Un ingrediente básico para cualquier valenciano, y para cualquier chino….
Supongo que tras la receta que acabo de incorporar y me temo que también inventar, debería añadir una critica de tan elaborado guiso. Si bien es cierto que el arroz estaba en su punto, el sabor, el sabor de este plato, lo definiría como, como…. diferente.

EL TieMPo MieNTRaS TaNTo

Finalista del premio planeta 2010 de la autora Carmen Amoraga,”El tiempo mientras tanto” es la historia de una espera, la más cruel y la mas larga espera, la de la muerte. La historia de Maria José, una joven que tras un cruel accidente de automóvil, espera inconsciente la llegada de tan fatídico y a la vez tan liberador día. A través de la ausencia, del silencio de su protagonista en coma y alrededor de esa cama de hospital, una serie personajes rompen ese mismo coma, ese silencio para, en una interesante metáfora, comunicar a partir del mismo, de la ausencia de la protagonista. Pero “El tiempo mientras tanto” no es solo la historia de Maria José, es la historia de sus Pilar, su madre y de una vida marcada por la perdida de su verdadero amor. La de Paco, su padre, acomodado o mejor incomodado en el rechazo de su mujer. La de Marga, su mejor amiga y su más incondicional confidente. Un microcosmos que se completa con una serie de personajes que se cruzan en aquella habitación y que, en una interesante metáfora, comienzan a comunicar a partir del silencio de la protagonista.
Una obra, una situación, en la que lamentablemente muchos nos podemos ver reflejados y que narra de una forma sencilla esa angustiosa espera, ese dolor contenido a la llegada de la muerte y el efecto que esta crea alrededor de los seres queridos que terminan convirtiéndose en los verdaderos protagonistas de la historia. Un tiempo, el que da titulo al libro, que les sirve para abrir sus corazones al lector y entender que tras la muerte es posible la vida, la de los que no se van y tienen que aprender a vivir con la ausencia de un ser querido.

jueves, 2 de febrero de 2012

La VeRRuGa NO es BeLLA

Lo confieso, soy adicto a los cupones-descuento que a diario me envían por Internet. Precisamente ayer, y aprovechando uno de estos importantes descuentos, fui hasta una clínica estética a fin de someterme a la extracción de 3 incomodas y antiestéticas verrugas. Así a modo 3x1 en plan oferta de Hipermercado me dispuse a dejarme intervenir quirúrgicamente, y suprimir de mi anatomía estas desagradables protuberancias merecedoras todas ellas del oscar a los mejores efectos, o mejor defectos especiales.
El hecho de que en la sala de espera, la recepcionista me invitase a firmar un documento por el que servidor asumía el riesgo de la intervención, me intranquilizó lo suficiente como para entrar en la consulta con cierto desasosiego, sobretodo cuando en uno de los puntos que firmé, daba mi consentimiento para que si el equipo medico lo consideraba oportuno, se me pudieran hacer fotografías. Un polémico punto mayormente porque una de las verrugas estaba ubicada en una zona digamos bastante comprometida y servidor los posados solo los hace en el Interviú.
Pese a todo hice entrada en el quirófano con la mejor de mis sonrisas, forzada pero sonrisa en fin. Una vez allí una agradable doctora con un acento que me hizo evocar mis viajes nunca realizados al caribe, me explico la forma en la que iba a realizar su trabajo, decantándose finalmente por una intervención con un bisturí-láser. Perfecto pensé yo imaginándome a la cirujana cual Dark Wader enfundando con maestría su espada láser al tiempo que me desvestía y me tumbaba en la camilla.
Para este tipo de intervención no creo que sea necesaria la anestesia apuntó la doctora.
¿Seguro? ¿Por qué no me droga aunque sea un poquito? Insistí yo.
La primera verruga en caer estaba ubicada en la barbilla, con destreza y minuciosidad la doctora se puso trabajar en la extracción mientras yo me limitaba a cerrar los ojos venciendo una insana curiosidad que en este caso era superada por el miedo. Notar como un bisturí, por muy láser que sea, va cortando una protuberancia de tu cuerpo, no deja de resultar repulsivo, sobretodo cuando un desagradable olor a pollo quemado empieza a instalarse en tus fosas nasales.
¿Te duele? Me pregunto la medico no sin cierta sorna.
No, dije yo al tiempo que apretaba mis puños con la sabana de la camilla en un desesperado intento por no ponerme a llorar como un niño.
Esta bien que los hombres sufráis un poco, ya que ni dais a luz ni siquiera padeceis en vuestras carnes la depilación, exclamo con ironia al tiempo que lanzaba una mirada complice a su ayudanta en un claro gesto de reviindicación feminista.
Servidor se limitó a cerrar los ojos aun con más fuerza, no tenía yo cuerpo para apologías de ningún tipo.
Tras la segunda verruga, cuya extracción resultó mas sencilla que la primera vino la más complicada y en cierto modo polémica, ya no solo pro su tamaño, sino por su emplazamiento en la parte superior de una de mis ingles.
De nuevo intente relajarme y adoptar una postura lo mas zen posible pero sin duda el hecho de ver a la doctora con es bisturí en la mano manipulando la zona mientras su ayudanta sujetaba la gasa no me ayudaba demasiado. Cuando me quise dar cuenta había tres mujeres manipulando en torno a tan controvertido emplazamiento. Mientras la doctora cortaba o mejor quemaba con el bisturí y la ayudanta sujetaba una gasa para evitar que la sangre se hiciese fuerte en aquella camilla, la joven recepcionista que me había atendido a la entrada hizo entrada sin que servidor entendiese muy bien porque había tanta gente en aquella sala.
A punto estuve de decirles que ya puestos porque no invitaban a pasar a una paciente que estaba en la sala de espera y al técnico de la calefacción que se encontraba revisando la instalación en el hall.
La extracción fue tan rápida como dolorosa, al término de la misma la doctora me preguntó si quería guardar la verruga de recuerdo, una oferta que decliné con educación. Mi fetichismo no llega a esos grados de perversión.
Lastima que el cupón solo fuese para 3 verrugas y no más, si bien es cierto que erradicaron las que mas me preocupaban no me hubiera importado ya que estaba allí que hubiesen erradicado alguna más que asoma con descaro por mi cuerpo. A punto estuve en un descuido de arrebatarle el bisturí láser a la medico y cual Mr. Bean en aquel inolvidable scketch del dentista, comenzar a auto extraerme el resto de verrugas de mi cuerpo en plan kamikaze.
En un par de semanas debo volver a la clínica para ver como evolucionan las cicatrices, quizás para entonces compré otro cupón y no se… me haga una liposucción.


ViNiLoS dE ORo