Mon petit baño

La reforma sigue en marcha, ya hay zonas de la vivienda que no parecen Kosovo. Cuando el otro día subí y me encontré el cuarto de baño chapado por casi se me saltan las lágrimas, vaya ni cuando se murió Chanquete que en paz descanse. La gente que me conoce y sabe de mi afición al colorido desmesurado han flipado un poco al ver lo minimalista de la propuesta baño. Predominan los tonos grises y el blanco, más adelante introduciré el color en ese universo paralelo de los complementos del baño. Me he tenido que reprimir a la hora de no convertir en baño en un spa con jacuzzi incluido, el problema era que si ponía una bañera de hidromasaje hubiera tenido que saltarla con pértiga para acceder a los sanitarios y claro aunque bonito no resultaba nada practico, curioso, divertido… pero practico nada. También podría seguir los sabios consejos de José, mi diseñador de interiores con una propuesta algo más arriesgada que consistía en suprimir el salón comedor por un inmenso jacuzzi.
Si bien es cierto que hay elementos de la casa mas prescindibles como el lavavajillas, el horno, la vitro, la lavadora.. hay otros totalmente imprescindible como la televisión/es, el ordenador, la nevera o el mismo jacuzzi. Sigo en conversaciones con mi interiorista, el insiste en el tema jacuzzi pero su propuesta a la par que innovadora y moderna, muy moderna pues como que no la acabo de ver, además me da la impresión de que a los vecinos de mi comunidad no les haría demasiada gracia que colocase la bañera-hidromasaje en el descansillo de la escalera.